Mi perro es una hiena espantosa
un plañir estentóreo de verano
una negra carrera enrarecida
atravesando los pastos altos
y el campo de adormideras.
Mi perro de Charleroi
es un terrible aullido a la luna
y un enojo hacía los techos
y las malas sombras.
Mi perro suda en verano
y el invierno
le sienta tan cómodo.
Vos no sos como mi perro
no te basta con alcanzarme una vara
ni con los huesos muertos.
hola Viking, muy buenos tus poemas, el del viking depresivo, ja, si entiendo.
ResponderEliminarUn beso,
la intempestiva